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En cualquiera de los dos casos, las empresas que prestan dichos servicios ofrecen diferentes formas de crear las páginas Web, que son las que se publicarán en un formato adecuado para poder ser visualizadas a través de la red internet. Casi siempre existe la opción de que el usuario cree sus propias páginas y luego mediante un programa de transferencia de archivos, ubique las páginas creadas en las computadoras que difundirán la información. También pueden ser creadas mediante programas asistentes (proporcionados por las mismas empresas que alojarán las páginas Web) mientras se permanece conectado al internet, pero si no se tienen conexiones rápidas de transferencia de datos, puede resultar una labor muy tardada. Otra alternativa es la de contratar los servicios de terceros para que ellos se encarguen del diseño de las páginas, así como de su publicación, permitiendo de esta manera a la persona o intitución que desea tener presencia en internet, concentrarse en el contenido informativo que será dado a conocer. Regresar a la Página inicial Regresar a la Página |